ENTREVISTA al PROF. MARCOS MAIOCCHI
ENTREVISTA al PROF. MARCOS MAIOCCHI*:
* Doctor en Ciencias Químicas. Profesor titular FaCENA-UNNE. Director de Proyectos de Investigación.
1. A modo de cuestión global, ¿existen relaciones de transferencia de conocimiento desde la Universidad hacia el sector de producción de la Yerba Mate?
Una muy linda pregunta para responder. La actividad yerbatera tiene como líder global a nuestro país, en término de producción, consumo y exportación. Tengo el honor de haber conocido y aprendido acerca de esta actividad junto al Dr. Jorge Avanza, uno de los pioneros en investigación y transferencia al sector yerbatero. A medio siglo de los trabajos de APRYMA (Asociación Promotora de la Yerba Mate), hoy somos un grupo grande de personas que seguimos investigando sobre el tema. Durante estas cinco décadas tanto la UNNE como la UNAM, seguidas por otras Universidades Nacionales e incluso privadas, han realizado aportes al sector. Hoy día tenemos establecidas relaciones de trabajo entre Universidades, con trabajos comunes. Este aspecto puede ampliarse, porque la Yerba Mate es objeto de estudio por parte de grupos de investigación en numerosos países.
2. Las contribuciones realizadas por los académicos en el Subcomité de Yerba Mate del IRAM, ¿resultan de tareas de investigación desarrolladas en la Universidad? ¿pueden inscribirse entonces en el marco general de la pregunta anterior?
Absolutamente SI, gran parte de las normas disponibles en Yerba Mate se basaron en las normas ISO para Té, con los correspondientes ajustes. En otros casos las determinaciones se adaptaron de trabajos de investigación, manuales como el de la AOAC (Association of Official Agricultural Chemists), libros sobre análisis de alimentos, y otras de desarrollo nacional. Todas se ensayaron integrando actividades interlaboratorios desarrolladas por las Universidades Nacionales. Por lo tanto, la segunda pregunta también puede responderse afirmativamente.
3. Las intervenciones de los representantes de las Universidades en los órganos de estudio de normas, ¿se reconocen formalmente como actividades de valorización del conocimiento, al momento de evaluarse la dimensión de vinculación tecnológica en procesos de autoevaluación y evaluación externa?
Esta pregunta sí que es difícil y hasta puede provocar molestia mi respuesta. Personalmente, no concibo la investigación si la misma no tiene como objetivo principal resolver algún problema. A quienes integramos el sistema universitario, nos "miden" en función de la producción en revistas de impacto, y muchas veces, nos pasa que el tema que estudiamos no es de interés de las revistas, pero si talla en lo más profundo de nuestra esencia zonal, regional y hasta nacional. Las personas que integramos los subcomités de normalización, en función de la presencia e intervención en el desarrollo de las normas, terminamos siendo citadas cuando se publican. Creo que intervenir en el equipo de trabajo de una "norma" es mucho más relevante que sumarnos como autores o coautores en un paper. Reconozco que el "ítem" relacionado a pertenecer a instituciones de normalización está presente, pero no "pesa" como la producción científica. Esta respuesta puede incomodar, pero no estoy solo en mi convicción.
4. Acerca de la interacción entre los diversos actores dentro del Subcomité, ¿se alcanza en los hechos el principio de consenso que es sostenido como valor fundamental en la actividad de normalización?
Si, se alcanza. Hay temas que afectan a la actividad y al humor social, como decisiones de política económica, control o liberación de precios, mercado de importación- exportación, entre otras. Sin embargo, en las reuniones se abordan los temas y se consigue avanzar. Es fundamental incrementar la participación del sector productivo.
5. Hacia el interior de la Universidad, ¿se utilizan las normas técnicas como material de cátedra, y como documentos de referencia en tareas de laboratorio, para la docencia y la investigación?
Esto va a depender de la asignatura. Aquellas que se relacionen a la bromatología y análisis de alimentos las utilizan, mientras que en otras las citamos dada la importancia que tiene la normalización para determinadas carreras, y desde ya que son utilizadas y referenciadas en los trabajos de investigación.
6. ¿Considera que las normas IRAM elaboradas para la Yerba Mate aportan una herramienta de fortalecimiento para las empresas del sector, contribuyendo al desarrollo regional?
Recupero lo citado precedentemente acerca de la participación del sector productivo. La actividad yerbatera tiene pequeños, medianos y grandes productores. Desde empresas familiares, pymes a otras con integración vertical, con participación en el mercado internacional y hasta multinacionales. Todas deberían estar representadas en el Subcomité, porque toda aportan al desarrollo regional.
7. Para finalizar, ¿se observan perspectivas favorables para el desarrollo futuro de la normalización técnica vinculada a la Yerba Mate?
Quienes consumimos yerba mate, tenemos mucho que aprender todavía. La calidad y el precio del producto suelen definir la elección, otras podemos resultar fieles a una marca o a los productos de una determinada empresa, pero muy pocos buscamos en el paquete algún sello que vincule al producto con la normalización. Conforme el mercado se interese más por lo que consume, mayor perspectiva de desarrollo tendrá la normalización. Considero que está la base para que ocurra, se viene trabajando desde hace mucho tiempo, pero es necesaria la mayor participación del sector productivo, perdón si resulto reiterativo.